Elegido en una encuesta en Clarin.com, dice que aún se siente productor, que la plata no lo desvela y que su hija le cambió la vida. También habla de su distanciamiento de Mariano Iúdica.
-La gente te eligió con el 59% de los votos. Tenés fama, dinero. Todo muy lindo. ¿Pero qué te quitó la popularidad?
-Tiempo, sobre todo. Antes como productor laburaba mucho, pero los fines de semana estaba más tranquilo. Ahora no tengo ni un domingo, ni un día libre. Un descanso en el que no haga nada de nada. Siempre un ensayo, una reunión. Algo.
-¿Te sentís más actor que productor, o al revés?
-Al productor lo veo como un colega. Al actor... No sé. No me molesta si me dicen actor o no. Tengo la suerte de estar en el programa más visto. Entonces la gente que me va a ver al teatro sabe quién soy y de dónde vine. No busco el título de actor o comediante. Yo soy esto.
-A los periodistas a veces nos cuesta catalogarte.
-Lo noté. Pero no tengo que decirle a nadie quién soy ni llenar un formulario a ver qué pongo. Productor voy a ser toda mi vida. También disfruto mucho de ser actor y estar arriba del escenario. Ojalá se siga dando así.
-¿Te da miedo que se corte?
-Siempre tuve el concepto de que había gente que era famosa y al otro día desaparecía. Yo decía: ‘Eso me puede pasar a mí'. Pero bueno, por ahora no pasó.
-¿Cómo fue la primera vez que subiste a un escenario?
-En los primeros ensayos lloraba, literalmente. Leía el guión así (acerca sus manos hacia la cara). Hasta dos días antes tenía el guión en la mano como excusa para bajar la mirada. Luego cambió. Hoy me siento más seguro.
-Cambió tu economía, también. ¿Qué te genera eso?
-Soy muy desprendido de la plata. Gano otro sueldo, sin dudas. Tampoco el que la gente se imagina. Pero hoy el sueldo no es más mío, es de mi hija Olivia. Todo para ella. Con Paula (Chaves) estamos ahorrando para ver si podemos comprar una casa.
-¿Sentiste culpa por ganar un poco más que otros?
-Eso lo pensé en el primer año, que hice muchas presencias. Luego dejé de hacerlas. Venían algunos y me decían que no hiciera temporada, que hiciera todo el verano curros. Yo prefiero tener un trabajo y estar tranquilo.
-¿Te analizás?
-No, hace bastante que no. Fui con un tipo y me bostezaba en la cara. Miraba la hora por abajo. Después encontré una mujer con la que me iba muy bien. Pero era de Lomas de Zamora. Me mudé y dejé de ir.
-¿Y en qué te apoyás?
-En mis amigos y familia. Desconecto mucho en mi casa. Mis amigos me apoyan cuando bailo. Pero después, cuando estoy con ellos, desconecto. Cuando juego a la play con los chicos se para el tiempo y soy uno más de ellos. No hablamos de mí. Casi ni hablamos, en realidad. La típica, vuelve Paula y me dice: ‘¿De qué hablaron?'. ‘No sé, yo salí campeón dos veces, Agustín dos', le contesto.
-Te pusiste de novio apenas fuiste famoso. ¿Nunca alguien te dijo ‘justo ahora'?
-Al principio bastante. ‘Mirá lo que te perdiste. Sabés lo que podías haber hecho...', me decían. Pero en mi vida tuve pocas relaciones serias y largas. Entonces, sin pensarlo buscaba todo esto, quería una relación estable. Tenía el deseo de tener una hija...
-Y llegó.
-Nació Olivia. Y era lo que todos me decían: me cambió la vida. Hoy todo pasa por ella. Saber que vuelvo a mi casa y está ahí es bárbaro. Ahora dice algunas palabras. Al principio el padre no puede hacer mucho, y es difícil la conexión.
-Te casaste. Y en tu boda las preguntas fueron sobre la ausencia de Mariano Iúdica. ¿Te molestó eso?
-Son las reglas del juego. Uno no decide de lo que habla o le van a preguntar. No lo invité, y eran obvias las preguntas. Con Mariano no volvimos a hablar. No hubo una discusión. En la temporada nos alejamos un poco. Luego pasó lo que pasó... Fue una decisión que tomé y no me arrepiento para nada.
-Iúdica dijo en una nota que en Ideas del Sur te efectivizaron por un pedido suyo. ¿Es así?
-No, él me pidió para que sea productor. Eso sí. Era asistente de producción y me puso de productor de piso en La Cocina. De eso puntual de la efectivización no me acuerdo.
-¿De qué trabajaste además de productor de TV?
-Laburé con mi viejo, de cadete . Iba a hacer pagos, trámites por microcentro. Después fui mozo por un día, pero no me gustó. Ahí apareció Ideas. Y de ser un vago pasé a laburar 14 horas por día. Y, ya te digo, no tengo tiempo para otra cosa.
Pedro nota en ExtraShow - 29 de Noviembre por chavesyalfonsoo
NOTA: clarin.com/extrashow
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